martes, 12 de octubre de 2010

RECUERDOS DEL PASADO. Parte I

RECUERDOS DEL PASADO. Parte I Una historia que relata lo que nuestra pasión por los naufragios puede hacer, es la vida de Mel Fisher, quien estuvo 16 años detrás de los restos del Santa María de Atocha, pero leamos lo que Tito Rodríguez nos contó (El Gran Zeus lo tenga en sus Aguas): 03 de Septiembre de 2006 : 20:19. 
Por: subvitur La palabra "naufragio" tiene gusto a fracaso y olor a misterio. Las historias que rodean a la de un barco hundido suelen ser tenebrosas y tapizadas de leyendas y coincidencias que desafían la imaginación. Simplemente no hay mares sin sal, ni naufragios sin misterios. Corría el siglo XVII y América sangraba oro, plata y joyas preciosas que abultaban las repletas arcas de los reyes de España. Las siluetas de los galeones se recortaban amenazantes en los atardeceres del Mar Caribe. Su misión era transportar el producto por aguas colmadas de peligrosos y desconocidos escollos. Los tripulantes se debatían entre la ambición y la carga máxima que un barco de la época podía transportar. La ambición solía ganar. El 4 septiembre de 1622 una flota de 28 embarcaciones partían desde La Habana hacia España, en sus bodegas rebosantes se apiñaba plata de Perú y México, oro y esmeraldas de Colombia, perlas de Venezuela, los tesoros de un imperio que se hundía con la conquista. Pero no todos los barcos llegarían a destino. El 6 de septiembre la flota sería alcanzada por un feroz huracán que asesinaría a ocho de sus embarcaciones, entre ellas Nuestra Señora de Atocha que se fue al fondo llevando consigo 265 almas. Sólo lograron salvarse del violento naufragio tres marineros y dos esclavos. Un segundo huracán ocurrido un mes después esparciría aún más los restos de la nave y su preciosa carga. Pese a los esfuerzos españoles por recuperar el botín, parecía que el Atocha había sido definitivamente tragado por el mar y había desaparecido para siempre. Mel Fisher no era sólo un buscador de tesoros, ni un buzo avezado, era además un hombre obsesivo y persistente. Decidido a encontrar los restos del Atocha empleó 16 años de su vida en los que formó un equipo de buzos para desanudar la historia. La férrea voluntad de Fisher finalmente dio sus frutos. El 20 de julio 1985 el detector de metales del barco de Fisher enloqueció. Dos buzos bajaron a investigar y sólo se encontraron con un arrecife en forma de pirámide alargada, rasparon una de las "piedras" y descubrieron que se trataba de barras de plata apiladas. El galeón de madera había desaparecido por completo y el tesoro quedaba expuesto a pocos metros por debajo de las transparentes aguas. El Atocha había sido encontrado después de permanecer cautivo del mar por 363 años. Lo que siguió fue el rescate de un fantástico tesoro conformado por 1.041 barras de plata, 77 lingotes y discos de oro, varias cajas con 3.000 monedas de oro cada una, 3.000 esmeraldas colombianas y 85.000 objetos preciosos como cadenas y crucifijos de oro. Se trataba, nada menos, que del tesoro rescatado más grande de la historia después del descubrimiento de la tumba de Tutankamon. Impresionante si se tiene en cuenta que el Atocha era apenas una de las 28 naves de la flota... Entre los objetos había una copa hecha en oro contra conjuros a la que se le atribuía el poder de absorber los venenos que tuviera la bebida. Sin duda cada uno de los artículos rescatados tenía su propia historia de misterio y leyenda y no sólo habían tomado la vida de los 265 marineros si no la de miles de nativos que se emplearon para su extracción y fabricación. 

Ni siquiera Mel Fisher quedó fuera de la carga de misterios y coincidencias, ya que su nacimiento se produjo el 21 de agosto de 1922, apenas 16 días antes de cumplirse exactamente 300 años del naufragio. Curiosamente, un día por cada año que le demandó la búsqueda. Hay quienes aseguran que aún quedan riquezas del Atocha esparcidas en el fondo y quienes aún están buscando los restos de las otras siete naves hundidas. Pero hay más, muchas más. El mar, ambicioso al fin, esconde los tesoros más fantásticos en la colección naval más grande con la que se pueda soñar. Entre sus aguas duerme pacientemente la historia de la humanidad, esperando por siglos en el fondo de coral a aquel que se anime a arrebatársela y la regrese a la superficie rodeada de leyendas y misterios. Tito Rodríguez Director Instituto Argentino de Buceo Este artículo liviano, que puedes distribuir entre tus amigos, tiene por objeto difundir aspectos desconocidos del mar porque: "No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce"

lunes, 13 de septiembre de 2010

Naufragios en Isla Larga Puerto Cabello, Parte II


A raíz de las declaraciones del presidente Roosevelt, el 30 de marzo fueron incautados numerosos barcos italianos y alemanes que se encontraban en puertos norteamericanos. La información, como un reguero de pólvora, corrió entre los tripulantes de los barcos internados en Puerto Cabello. Y sus capitanes no vacilaron. "El cielo se puso rojo con el resplandor", "El agua hervía en torno de los barcos"; estos fueron algunos de los titulares que aparecieron en la prensa del 1 de abril. En la noche del 31 de marzo del mencionado año las tripulaciones de los barcos refugiados incendiaron sus propias naves siguiendo las órdenes del alto mando. Aproximadamente a las ocho de la noche ya se habían aglomerado una gran cantidad de personas en el puerto, sorprendidas y confundidas miraban estupefactos el horrible espectáculo. Pronto, se corrió la voz de que esto no era ningún accidente. -Primera plana diario "La Esfera" 02/04/41- La población estaba indignada. No podían creer que estos refugiados a quienes habían tratado como huéspedes especiales pudieran poner en peligro las instalaciones del puerto que los había auxiliado en su tiempo de desdicha. Gracias a la rápida intervención de las autoridades Venezolanas, no se incendio el barco italiano "Bacicin Padre" el cual se encontraba cargado de 8.000 toneladas de petróleo; Petróleo que al ser incendiado pondría en grave peligro el puerto y barcos cercanos. La multitud no toleró semejante insulto y el disgusto general se convirtió en una persecución de marineros y oficiales que duró hasta altas horas de la madrugada. Al día siguiente se renovaron las indignaciones y las masas se aglomeraron enfrente de la casa #5 de la calle comercio, donde se rumoraba que se encontraban escondidos varios marineros italianos. Las puertas y ventanas de esta casa, al igual que sus refugiados, fueron salvadas por la policía. Afortunadamente no hubo ningún linchamiento. Después de haber sido capturadas todas las tripulaciones de los barcos (alrededor de 300 marineros y oficiales) fueron llevadas a distintos lugares ya que no cabrían en la jefatura de la policía. Algunos marineros alemanes fueron llevados al cercano pueblo de San Esteban, donde se hospedaron en casas de familias alemanas que vivían en este pueblo. Las tripulaciones fueron enjuiciadas. Los cargos presentados por Venezuela fueron dos principalmente: 1-Haber puesto en peligro las instalaciones del puerto; y 2-Haber violado el tratado de refugio que Venezuela generosamente había otorgado. Los marineros fueron condenados a dos años de prisión, mientras que los capitanes sufrieron una sentencia de 4 años. Poco después los italianos fueron perdonados; los alemanes no. Muchas de estas personas fueron llevadas a la colonia de Chirgua donde el clima les seria un poco más agradable y familiar; allí se instalaron. La gran mayoría de estos marineros y oficiales, vivieron el resto de sus días como ciudadanos venezolanos y adoptaron este país como el suyo. Algunos ya habían contraído matrimonio con mujeres de Puerto Cabello como el capitán de la nave italiana "Jole Fassio" el señor Amleto Rovelli quien fundó una importante compañía aduanera en La Guaira. Sabemos que el capitán del "Sesostris" único barco alemán involucrado en el hecho, el señor Karl Ueding también se quedó en Venezuela y se caso. Desafortunadamente no hemos podido contactar a sus descendientes. Los barcos incendiados: "Jole Fassio", "Trottiera" y "Teresa Odero" fueron reflotados. Mas tarde todos excepto el "Teresa Odero" fueron vendidos a los E.E.U.U. conjunto a los otros tres barcos italianos que se encontraban en la bahía, el "Bacicin Padre", el "Alabama" y el "Dentice"; el "Teresa Odero" fue adquirido por Argentina. El buque alemán "Sesostris" quedo tan destruido que fue imposible su reconstrucción, y por orden del presidente Isaias Medina Angarita fue desguazado, remolcado y abandonado en una isla cercana a Puerto Cabello llamada Isla Larga, donde aun permanece hundido, como mudo testigo y recuerdo de aquel triste episodio. Nosotros, S.E.A. expediciones marinas hemos realizados innumerables inmersiones en el Sesotris, el cual consideramos como el mejor sitio para la práctica y el entrenamiento del buceo en barcos hundido para los buzos de la región central del país. Su gran cantidad de pasillos, bodegas, cuartos y su enorme sala de máquinas, convierten al Sesostris en verdaderamente un reto para principiantes y expertos. Lamentablemente la visibilidad en esta zona no es muy buena. Sin embargo, dentro de los cuartos y pasillos la visibilidad mejora considerablemente invitando a explorar las entrañas de este mudo testigo. Gracias a este histórico evento, Isla Larga ha ganado un hito que ayuda a mantener el ecosistema del mundo marino. Hoy en día, esta embarcación alemana se ha convertido en un arrecife coralino con forma de barco que aloja a una enorme cantidad de vida marina.
Dibujo realizado por Arq. Alejandro Selmi - 1.985 Toda la información aquí copilada es el producto de las extensivas investigaciones realizadas por S.E.A. Expediciones. (Algunas fotos fueron agregadas luego por Scubadelivery y Subvitur)
Como dato curioso, el otro buque conocido como “Jaco” de origen italiano al parecer no tuvo nada que ver con los hechos acontecidos a principios de los años 40, sin embargo el "Jaco" muy probablemente haya tenido una situación similar a los anteriores buques, aunque se desconocen mayores datos con respecto a este buque su destino final igual que el del Sesostris se debió a las delicadas situaciones vividas por los barcos del eje en aguas caribeñas en los primeros años de la guerra.

Otro de los naufragios que pueden encontrarse en la zona, de los cuales buscare sus historia, para contársela, son los siguientes:

El Spiridum: cerca de Puerto Cabello. Se trata de un barco que naufragó hace muy poco con 1770 vacas. Es tal cual como el desierto de Arizona pero en el mar. Las Osamentas están intactas. Es buceo técnico ya que los restos se encuentran entre los 35 y 50 metros de profundidad.

El Mejillon: En la Isla de Alcatraz. Es un guardacostas dinamitado a 28 mtrs.

Una gabarra: volteada entre los dos barcos de Isla Larga.

El Barco Misterioso: es una nave de pesca sin ningún tipo de registros. Se encuentra en la mitad de Isla Larga a 19 metros.

Carmen Fabiana: en el medio de la bahía de Guabinas, a 40 metros, pero se bucea a 30 mtrs. Luce imponente a medida que te acercas.

Gran Roque: un poco mas allá, a 24 metros, pero se puede visitar desde los 15 metros.

Para quienes no conozcan mucho de buceo, les puedo decir que en los alrededores de los naufragios se forman los arrecifes de manera extraordinaria, con muchísima vida marina, corales y muchos peces.

Y como en todos mis artículos, les coloco ahora un video relacionado con Isla Larga en el programa Azul Profundo, de Sunchannel: 

Parte I

Parte II

Parte III 

Parte IV

Naufragios en Isla Larga Puerto Cabello, Parte I

ISLA LARGA – PUERTO CABELLO. 

Cuantas inmersiones no hemos realizado en las tranquilas aguas de Isla Larga en Puerto Cabello – Venezuela? Desde 1985, hemos realizado infinidad de viajes en donde, al principio, nos íbamos en autobuses de 48 pasajeros, con tanques y equipos de buceo, y luego allí, dictábamos clínicas de submarinismo (Try Scuba), a todos los que quisieran participar. 

De allí surgieron muchos buzos básicos que les encanto el paisaje observado en esos barcos tenebrosos que se veían a flor de Agua. Isla larga es una pequeña isla con hermosas playas y arrecifes ubicada a 15 minutos en bote de la costa de puerto cabello. Allí descansan los restos de dos embarcaciones, el cual hace una extraña interrelación con la vida marina y los turistas y visitantes de la isla. Isla Larga es un lugar excelente para practicar submarinismo y snorkeling. Otra tradición deportiva extrema reciente es la práctica de Natación en calidad de Aguas Abiertas, los nadadores expertos se zambullen al mar desde Playa Huequito (en tierra firme) y cruzan ida y vuelta el canal que separa Isla Larga con tierra firme, si tiene suerte podrá ver a los nadadores nadando 5 kilómetros a mar abierto. Pero, como se llaman estas embarcaciones? De que época son? Chocaron? Son de Guerra?, pues bien, estos naufragios se llaman “El Jaco” y el “Sesostris”. Recopilando información de nuestros amigos de: Scubadelibery conseguimos la primera historia:

LA HISTORIA DEL SESOSTRIS (1922-1941) Sesostris I, (1971 - 1928 BC), was the second king of the 12th dynasty of ancient Egypt. He was the son of Amenemhet I. To secure the throne for himself after Amenemhet's assassination, he publicized his father's testament The Instructions of Amenemhet, which became an Egyptian literary classic. Sesostris conquered Nubia during his prosperous reign, and was succeeded by his son Amenemhet II. Para finales de 1940, se encontraban refugiadas 7 embarcaciones extranjeras en la bahía de la ciudad de Puerto Cabello. Estas naves mercantes pertenecientes a los países del eje (Italia y Alemania) 
habían sido sorprendidas por la guerra en aguas del mar caribe; ellas fueron las protagonistas de un interesante y curioso episodio de la segunda guerra mundial que nunca se ha contado. 

Puerto Cabello para el año 1939 jugaba un papel de gran importancia para el comercio entre Venezuela y Europa. Existía una fuerte colonia extranjera en la ciudad, especialmente la colonia alemana y se dice que para principios de siglo esta ciudad era el lugar de Venezuela donde se revelaba, en su más amplia forma, la iniciativa empresarial de los alemanes. Estos eran dueños de las casas comerciales más importantes de la época y los barcos mercantes rutinariamente surcaban las aguas que separaban América de Europa. . La frecuencia de los viajes era tal que se dice era más fácil viajar de Puerto Cabello a Alemania que de Pto. Cabello a Caracas, ya que abordar un barco era mucho mas fácil que emprender el camino hacia la capital. El interesante intercambio de bienes y cultura que se desarrollaba fue repentinamente interrumpido cuando en septiembre de 1939 las tropas alemanas comienzan su avance sobre territorio polaco. La segunda guerra mundial había comenzado. Los barcos mercantes pertenecientes a los países del eje que emprendían actividad comercial en el Caribe, se encontraron envueltos en una situación bastante difícil e incomoda, ya que eran acosados por barcos ingleses y franceses que se encontraban en la zona; a estas naves les era imposible regresar a sus países de origen. Seis barcos de bandera italiana y uno de bandera alemán pidieron refugio a Venezuela dada su condición de país neutral. El refugio les fue concedido y estas siete embarcaciones se alojaron en la bahía de Puerto Cabello. 
Estas naves con sus tripulantes permanecieron aproximadamente dos años en la ciudad. Los habitantes de Pto. Cabello recibieron de buena forma a las jóvenes tripulaciones refugiadas y se convirtieron en una especie de invitados de la ciudad. Los extranjeros visitaban con frecuencia el cine, bares, etc. y de alguna forma u otra formaban parte de la población para la época. El gobierno mantuvo su actitud de neutralidad y hasta entregaba los respectivos sueldos a los marineros de los barcos refugiados. La Navidad de 1940 fue triste para las tripulaciones, pero un poco menos para la del "Sesostris", 
el único barco de bandera alemana, ya que estos fueron invitados a la fiesta de Navidad que se solía festejar en el Club Unión, como se llamaba el club alemán de Puerto Cabello. En esta celebración a la cual asistieron los oficiales y los marineros, muchos de estos ofrecieron en venta objetos de artesanía elaborados por ellos mismos, como timones, maquetas de barcos celebres, etc. (Una de estas maquetas que reproduce al "Graf Spee" se encuentra en el poder del señor Enrique Aristeguieta Gramcko). En otros países del continente americano también se encontraban internados barcos en las mismas condiciones. El 29 de marzo de 1941 el presidente de los E.E.U.U. Franklyn D. Roosevelt da la orden de proceder a incautar los barcos alemanes e italianos ubicados en los puertos norteamericanos. A raíz de estas declaraciones México y Cuba toman medidas parecidas. Los capitanes de las naves mercantes habían recibido con anterioridad instrucciones de no permitir bajo ninguna circunstancia que estas embarcaciones cayeran en manos enemigas. El señor Amleto Rovelli Capitán de uno de los barcos italianos llamado "Jole Fassio" relato su versión de este episodio: 
"Veníamos lastrados con agua de Génova, con destino a Curazao, a cargar gasolina y kerosén. Llevábamos nueve meses de guerra y mi país, Italia, seguía en posición neutral. Pasábamos grandes sustos en cada viaje, pues en medio del océano nos detenían las naves aliadas para revisarnos, medir el cargamento y hacernos miles de preguntas, tratando de descubrir si habíamos abastecido a algún Submarino enemigo. Además éramos escoltados permanentemente por los británicos, que en cualquier momento podían  hundirnos, si desobedecíamos sus órdenes.

 Fue en ese último viaje de mi vida. El 8 de junio de 1940, cuando recibí la noticia de que Italia entraría en guerra... y, por lo tanto, debería refugiarme en la boca de las amazonas, en Brasil. Sin embargo, antes de llegar al mencionado lugar, recibí una contraorden: debía regresar a Curazao con mi petrolero de nueve mil toneladas de desplazamiento, para cargar combustible. Y así lo hicimos. Sin embargo, estando a tres horas de navegación para llegar a puerto y ya enviados los telegramas anunciando la llegada, a las seis de la tarde me informo el almirante Cavagnari, del Estado Mayor de la marina italiana, que siguiera hasta Venezuela para refugiarme, hundiendo inclusive el barco si fuera necesario. La misma orden la recibieron los demás capitanes, que ya se encontraban en aguas territoriales venezolanas. Fue así como entre al puerto de Puerto Cabello, donde permanecí hasta el 31 de marzo...".

domingo, 8 de agosto de 2010

Naufragios y tesoros II

Recopilado por Carlos Martinez el jueves, agosto 20, 2009Patrimonio de pecios (barcos hundidos) en

Venezuela EL NACIONAL - Domingo 16 de Agosto de 2009 Siete Días/3. Imagen: mapa de barcos hundidos en las costas venezolanas. La peor tragedia marina del siglo XVII ocurrió en Venezuela Un grupo encabezado por Charles Brewer exploró el naufragio en 1998 Hace más de tres siglos, corsarios y piratas franceses se lanzaron a los mares americanos para impulsar la expansión de Francia, azotar colonias españolas y conquistar los enclaves holandeses. En su libro Demonios del mar , Luis Britto García relata que Luis XIV envió en 1678 al conde Jean D’Estrées a la conquista de las costas venezolanas. A través del río Orinoco, tomó Guayana. Después invadió Martinica, Margarita, Trinidad y Tobago. Luego le encomendaron ocupar Curazao con una flota de 15 navíos y más de 1.000 hombres. Pero los vientos los hicieron encallar en el arrecife que rodea el archipiélago Las Aves, al noroeste de Venezuela. La mitad de la tripulación se ahogó. Para la época, fue la peor tragedia marítima: además de hombres, Francia perdió barcos importantes de su armada. "Venezuela estuvo a punto de ser inglesa, francesa, holandesa. D’ Estrées barrió nuestras costas. Ese naufragio nos salvó de ser una suerte de Guyana francesa", exclama Britto vía telefónica. Agrega que en su actividad como buzo ha constatado el descuido de las costas. Cree que las autoridades no se han preocupado por ubicar y resguardar los pecios. Britto García participó en la exploración que en 1998 organizó Charles Brewer Carías, junto con otros buzos: Rodolfo Plaza, Federico Mayoral, Jaime Ballestas y el camarógrafo Carlos Vilkerman. Como invitado iba el estadounidense Barry Clifford, dueño de una empresa de investigación marina y de uno de los barcos mejor equipados para la expedición. "Queríamos hacer un registro fotográfico; enviamos comunicaciones al Ministerio de Interior y hablamos con el Instituto de Patrimonio Cultural", recuerda Brewer. Dice que había objetos de metal, perdigones, cañones de hierro y de bronce. De hecho, tiene en su casa una vasija y varios plomos de ese pecio, los cuales ¬asegura¬ donó al Museo Marino de Margarita, pero la institución aún no los ha retirado. En medio de la navegación, Clifford ordenó al equipo de Brewer que abandonara su barco. "Ninguno de ellos podía declararse descubridor del pecio porque ya se sabía que estaba ahí. Poco tiempo después del naufragio, Francia mandó a recuperar restos. Brewer y Clifford compitieron por el protagonismo", dice un miembro del equipo. En 2003, Clifford escribió el libro La flota perdida, en el que se atribuye el descubrimiento. En 1999, Brewer denunció que la Armada venezolana contrató una empresa para recuperar y comercializar los restos: "Alertamos 
al IPC porque eso pertenece a la nación. Nosotros sólo queríamos hacer el inventario, pero nos prohibieron volver". Plaza afirma que Mespa fue la empresa contratada y que ésta tenía relaciones con funcionarios de la Armada. La compañía, con el barco hondureño Explorer, estuvo en Las Aves estudiando el pecio. En 2000, representantes de la firma admitieron al periodista francés Vincent Noce que deseaban rentabilizar su inversión mediante la creación de "una industria de los descubrimientos". Aún se desconoce si extrajeron objetos y las conclusiones de la investigación. Algunos submarinistas afirman que el pecio está expuesto a saqueos. Fotos: Charles Brewer Carias. Ver articulo: Archipiélago de las Aves. Una Isla que nos cuenta su historia. Parte II Caracas Salvada en Las Aves (en la sección de Bitácoras, Turismo Azul pagina web; http://www.subvitur.com/ ) Etiquetas: Historia de las grandes potencias y el orden mundial, Historia de nuestro Patrimonio, Venezuela Hispana (1498-1810) Y como en todos mis artículos, les coloco ahora un video relacionado con la pesca artesanal de la zona:


  

Naufragios y tesoros I

Continuando con mi pasión, por los Naufragios, e indagando historias y recopilando información de algunos de estos sitios inexplorados, siempre hay historias interesantes, de las cuales muchos no conocemos, y siguiendo la filosofía, del Gran Tito Rodríguez, Director del Instituto Argentino de Buceo (Que El Dios Zeus lo tenga en sus Aguas). "No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce"… Estos artículos, son los que nos han motivado a seguir investigando y “soñando” podría ser la palabra? Tanto Gerardo mi socio como yo, siempre nos ha gustado indagar (en libros, Internet, revistas y cuanto articulo interesante consigamos por alli) y planificar viajes en un futuro, para conseguir el Tesoro más preciado y grande jamás encontrado, como es: "Un naufragio con una leyenda". Y que seamos nosotros los pioneros en estudiarla y contarla, ya que no aspiramos conseguir tesoros y lingotes de oro, porque para nosotros, lo importante es la satisfacción de encontrar una historia, una leyenda… (Aunque si conseguimos un tesorito dentro del ámbito legal, que nos ayude en estos estudios y a comprarnos nuestro barquito…. Pues bienvenido sea, jeje) Pero, sigamos con nuestra historia, esta vez con un artículo publicado por Adriana Rivera, recuerden que siempre los cuentos son en 2 partes: El mar de La Sabana nos espera ¿Qué tal si un día las aguas del mar se evaporaran y el inmenso paisaje marino queda desnudo, como un desierto? Dado que se trata de algo tan absurdo, quizás nadie lo haya imaginado. No obstante, vale la pena fantasear con todo lo que podría suceder. Quedarían infinitos esqueletos, piedras preciosas, paisajes desconocidos, barcos que nunca llegaron a su destino, pero también tesoros riquísimos, arsenales de batallas perdidas, otro mundo, en fin, capaz de suscitar discordias y disputas. Hay quienes saben que el mar oculta mil leyendas y se han especializado en la investigación histórica, en las rutas de los grandes naufragios de los tiempos imperiales. El último gran hallazgo de los cazadores de tesoros submarinos fue protagonizado por unos exploradores estadounidenses, la compañía Odyssey, quienes ubicaron los restos de un navío español del siglo XVIII, cuyo valor se calcula en 4,2 millardos de dólares. Con el hallazgo vino la disputa jurídica, ¿de quién es el tesoro, del país en cuyos fondos marinos está el naufragio o de quienes lo ubicaron? ¿Cuántos tesoros o naufragios guarda el mar venezolano? La pregunta viene a cuento porque el cuerpo dominical del periodico Venezolano el Nacional: "Siete Días" dedica sus páginas a una investigación de Adriana Rivera que cautivará a nuestros lectores. Al este del estado Vargas está el pueblo de La Sabana, y en las aguas del mar, "a menos de 100 
metros", hay sorpresas. Más allá de las langostas y de los peces que se rinden al arpón, están los restos de un antiguo barco que se fue a pique, nadie sabe cómo, si en batalla o en fatiga. La historia comenzó cuando unos pescadores extrajeron entre 6 y 12 cañones, de 400 años de antigüedad, según los enterados. Además, también cajas y cofres acompañan a los cañones. No se sabe si silenciosamente algunos cazadores submarinos ya pasaron por allí. De modo que como lo relata Adriana Rivera la leyenda de los cañones hundidos se ramifica en muchas otras. Algunos cañones fueron fundidos porque los pobres de espíritu que los han extraído no conocen su valor, y al bronce de 400 lo vendieron como chatarra. Uno de los protagonistas es el buzo José Antonio Laya que cuenta un poco de la historia oculta. Su testimonio es válido: "Vi que sacaron los cañones en dos lanchas, pero no imaginé que eran patrimonio. Después le conté a la gente que habían sacado eso y el pueblo se sintió robado. Los de Naiguatá me amenazaron de muerte por haber hablado y hasta la Armada me buscaba. Me tuvieron que poner protección policial". Cuenta, además, que en sus inmersiones ha visto al menos 50 cañones de bronce, además cajas y cajas cuyo contenido desconoce. Si hay algo que sorprende es la parsimonia de la Armada venezolana enterada del hallazgo y no muy motivada. Como es obvio, lo que el mar de La Sabana esconde es patrimonio de la nación, y es al Instituto del Patrimonio al cual le corresponde la última palabra. Adriana Rivera escribió los primeros capítulos de una historia que apenas comienza. El mar de La Sabana nos espera.

sábado, 24 de julio de 2010

Archipielago los Roques y II

Parque Nacional Archipiélago Los Roques Parte II. Por: Carlos Martínez Pedroza. Continuando lo vivido en esta maravillosa Isla, uno de los temas aprendidos y relatados, por los "roqueños" fue el Origen del nombre de los Cayos, descripción de diversos hallazgos arqueológicos prehispánicos y descripción de la fauna de Los Roques PARQUE NACIONAL ARCHIPIÉLAGO LOS ROQUES Parte II 

 Los nombres de las islas del archipiélago tienen orígenes muy interesantes, por ejemplo Sarqui fue Soeur del francés: hermana y Key del inglés: Cayo, y, escrito fonéticamente por los pescadores, se convirtió en Sarky, otros ejemplos son: Pirateky del inglés: Pirate - Key, Dos Mosquices una corrupción de: Domus Key, entre otras. 

Hallazgos Arqueológicos Tanto en Crasquí como en Dos Mosquices, se han encontrado fragmentos de piezas de cerámica prehispánicas. El material recolectado por arqueólogos patrocinados por el Instituto Nacional de Hipódromos, se encuentra en exhibición en el Museo de Arte de la Rinconada, en Caracas. En Dos Mosquices se ha extraído: cerámica precolombina, con adornos antropomorfos y ornamentos incisos, hachas y pectorales de piedra, flautas y puntas de proyectil de hueso, pipas de barro, idolillos y cuentas de barro, colgantes de conchas, discos y gubias de concha de botuto y un martillo de cuarzo cristal de roca. Junto con este material, se encontraron gran cantidad de huesos de tortuga, peces, conchas de moluscos comestibles, mandíbulas y cráneos de mamíferos. 

En la isla de Cayo Sal localizaron dos sitios de origen europeo, uno de la temprana época colonial, y el otro de ruinas de casas de ladrillos cocido, hornos para quemar ladrillo y salinas. Riqueza de Fauna Estas islas son ideales para los observadores de aves, ya que existen unas 45 especies: pelícanos, tijeretas, gaviotas blancas, rosadas y reales, pájaros bobos, garzas blancas y muchas más. 

El cayo Selenqui (Cayo Bobo Negro) ubicado al suroeste del atolón, es la favorita de las aves. 

Por su parte en cayo Francés , en el mes de mayo, hay centenares de gaviotas blancas y negras que llegan a hacer sus nidos. Las tortugas de mar (caretta caretta), carey (eretmochelys imbricata) y verde (chelonia mydas), ponen sus huevos en la playa, y hay cantidades de otros reptiles como lagartijas, camaleones, iguanas y otros que comparten las islas. Entre la fauna marina, los peces más preciados por su exquisita carne son: el pargo (Lutjanus), el carite (Scomberomorus), el mero (Epinephelus), rubia (Ocyurus), el corocoro (Orthopristis ruber) y la picúa o barracuda (Sphyraena barracuda). 

De octubre a marzo, llegan pescadores de todos los puertos a pescar langostas, y sacan unas 99 toneladas por año. Se ven inmensos pilones (de hasta dos metros de alto) de conchas secas de botutos, de los cuales los pescadores han sacado la carne que es muy preciada. También hay una concha de caracol, cuyo interior parece de madre perla, que resulta muy apetitoso. Sin embargo ha sido tal la explotación de éstos moluscos, que su pesca se ha prohibido en algunas zonas, y en todo el Parque está prohibida la pesca con arpón. 

Dos Mosquises actualmente se conoce como Cayo Estación Sur; ahí está la Estación de Biología Marina de la Fundación Científica Los Roques, establecida en 1963. Esta estación, auspiciada por la Fundación Mendoza, la Marina y el gobierno venezolano, y las antiguas Fundaciones Shell y Creole, ha montado inmensos tanques de cría en la isla a fin de aumentar la población de tortugas, langostas y cangrejos. La Estación tiene tres botes e instalaciones para buceo, incluyendo tanques y compresores. Tiene un laboratorio con acuarios de distintos tamaños y dos casas-dormitorios, donde se alojan los estudiantes. En la Estación se dictan con frecuencia breves cursos de ecología marina, cuyo tema principal es el estudio intensivo de la biología de los arrecifes de coral. Les obsequio ahora los videos correspondientes a este bello Archipiélago (En 4 Episodios del programa Azul Profundo de SunChannel Tv). 
Episodio I:
   
Episodio II:
   
Episodio III:
   
 Y Episodio IV:

domingo, 18 de julio de 2010

Archipiélago Los Roques Parte I

Entre el año 2004 y 2005 inicie una etapa de mi vida que me marco muchísimo, como fue trabajar en este hermoso Archipiélago de Los Roques - Venezuela y junto a mi compadre y amigo/hermano Gerardo Vázquez. Vivíamos una experiencia increíble, trabajando con Turistas y Nacionales, enseñándoles las bellezas submarinas, así como parte de las Islas que conforman dicho Archipiélago. Pero sobre todo, haciendo una de las cosas que mas me gusta hacer: bucear y enseñar a hacerlo. Tuve un gran reto en esos años, ya que debía dictar cursos, guiar grupos, conocer la Isla y su historia, y compartir con toda clase de personas y en otros idiomas (Ingles e Italiano en su mayoría), y este reto de enseñar así, no fue una tarea fácil. Pero aprendí muchísimo, y lo aproveche para continuar mi Educación continua en el Área del submarinismo, estudiando algunas especialidades y culminando mi nivel de Dive Control Specialist Instructor... y que mejor sitio para hacerlo que en este maravilloso lugar. Pero como verán en la foto, quedaba exhausto. Pero siempre había su recompensa, y eran: los atardeceres y los cuentos de todo lo que habíamos vivido durante la aventura diaria con quienes nos visitaban. Esos momentos, no tienen precio (mmm donde he oído ese slogan antes, jeje). Pero ya les contare esas historias en la Parte II, pasemos primero a conocer mas de esta hermosa Isla, con un material que recopile en ese año, y como siempre me ha gustado contarles, en varias Partes... 

 

Información del Parque y descripción de los cayos más importantes: 


Parte I : PARQUE NACIONAL ARCHIPIÉLAGO LOS ROQUES

 Las lagunas azules, las blanquísimas arenas del Parque Nacional Archipiélago Los Roques, están a 135-155 kms., directamente al norte del puerto de La Guaira, a tan solo 84 millas náuticas, del litoral central venezolano. Este atolón coralino, de 36.6 kilómetros, de este a oeste, por 24.6 kilómetros, de norte a sur, está ubicado entre los 11° 42' 00'' y 12° 4' 00''de latitud norte, y los 68° 9' 30'' y 68° 22' 35'' de longitud oeste. Las 225.241 hectáreas, que abarca este bellísimo Parque son el lugar ideal para practicar la natación, el buceo y la fotografía submarina entre espectaculares corales y peces llenos de colorido. Bajo un mar que reúne todos los tonos imaginables de verde y azul, nos podemos sumergir a un mundo de delfines, tortugas, langostas, botutos, cachamas, rayas y cientos 
de pequeños peces sorprendentes. El Archipiélago Los Roques es uno de los destinos más codiciados por los buceadores de todo el mundo. Para practicar el buceo con equipo autónomo es requisito imprescindible poseer el certificado reconocido por la Federación de Actividades Submarinas. El perímetro ovoide del atolón, esta bañado por aguas de un intenso azul, en cambio en las lagunas interiores varía según la profundidad, desde un fresco esmeralda a un tono casi violeta, todos de gran belleza. Hacia el sur la entrada al mar posee una vertiente de 600 brazas (1.097 metros), y en el norte se triplica esa profundidad. El arrecife de coral, que mide unos 24 km. de largo, crece principalmente hacia el este, donde existen corrientes frescas cargadas de elementos nutritivos. Para recorrer los arrecifes interiores de la laguna central, llamada Ensenada de los Corales, es preciso llevar una carta de navegación, porque la profundidad varía desde 0 hasta los 50 metros. El coral pulverizado ha formado playas suaves blancas, muchas de las cuales aún no han sido pisadas por el hombre. No hay retención de humedad así que la única vegetación que existe es de gramíneas salobreñas (67 variedades), matorrales de uvas de mar, cactos, otros xerófitos y manglares. Hay muy poca sombra natural, por lo que se recomienda utilizar sombrillas o protectores solares. Islas del Archipiélago Existen alrededor de 350 islas entre las cuales cuarenta son suficientemente grandes, el resto son formaciones de rocas, arrecifes coralinos, arena y lagunas internas, que aumentan su extensión al bajar la marea. La isla principal, El Gran Roque, tiene dos montículos, el más alto, de 110 metros, se ve desde muy lejos en el mar. En esta isla que mide 3,5 km de largo y uno de ancho, esta la pista de aterrizaje, donde se encuentra el centro de atención al visitante (Autoridad única e Inparques) en la cual puede tramitar las autorizaciones necesarias, el cobro de los impuestos y recibir toda la información que solicite sobre las diversas actividades, posadas, alquiler de embarcaciones y operadores turísticos. 
En El Gran Roque existe el único asentamiento humano permanente (de unas 1500 personas), la mayoría son emigrantes de la Isla de Margarita atraídos por la abundante pesca. En esta aldea de pescadores, se pueden arrendar botes conducidos por sus dueños, para visitar las otras islas. Actualmente hay una planta de desalinización y -si es necesario- la Marina Venezolana suministra agua potable adicional. Frente al Gran Roque hay un cayo llamado Rasquí, donde algunas personas que viven en Caracas han construido pequeñas casas de playa y comparten un tanque de agua. Al norte está el Cayo Francés, dos islas unidas por una barra de arena. El paseo es una buena excursión. El costado norte tiene una playa oceánica con un oleaje fuerte y el agua de la laguna es ideal para nadar y reunir conchas de mar. Hacia el sur, y levemente hacia el oeste, está Crasquí, donde abunda el chipi-chipi (Heterodonax bimaculatus). Buchivaco es una zona extensa de manglares. Cayo de Agua tiene una acumulación de arena que permite pasar a pie de una isla a la otra. En éste último existe un lago de agua dulce, en donde se dice que anteriormente (cuando no existían las plantas desalinizadoras de agua), los habitantes iban hasta ella para tomar el agua dulce necesaria para su consumo. Sarqui y Crasqui son muy cómodas para pernoctar, porque el agua es tan tranquila que la embarcación casi no se mueve. se puede llevar una embarcación con calado hasta de cuatro pies, a tres metros de la orilla. Y ahora como siempre, les regalo un Video relacionado con el Archipiélago Los Roques,

   

 En mi próxima entrega: hallazgos arqueológicos y riqueza de fauna en Los Roques.